Primary education reforms in Mexico greeted with both enthusiasm and scepticism, study shows
There has been a mixed response to primary education reforms in Mexico which have created widespread uncertainty among teachers, children and parents, new research shows.
Those affected have expressed concerns about lack of training to help them prepare for the major changes, but also enthusiasm about many of the aims.
The new Nueva Escuela Mexicana (NEM)in Basic Education represents a large shift in curriculum, pedagogy and assessment.
Subjects such as maths and science have been combined into integrated “formative fields”. There is a focus on education that places more value on local communities and an emphasis on active and interactive learning through projects.
Children also learn more about topics related to inclusion and diversity. Teachers have increased autonomy to adapt their work to local contexts.
The NEM has been met with both enthusiasm and scepticism. This research is one of the first to comprehensively gather people’s experiences and perspectives of the NEM in its first full year of implementation.
The study was carried out by Dr Nozomi Sakata, from Hiroshima University and Dr Nicholas Bremner, from the University of Exeter. They carried out 79 interviews with students, teachers, parents, head teachers, teacher trainers and supervisors in 12 primary schools in Nuevo León, Hidalgo and Chiapas.
The study was funded by the Japan Society for the Promotion of Science.
Dr Bremner said: “We found a mixture of positive and negative perspectives, but overall there was widespread uncertainty about the NEM reform. Although teachers, head teachers and teacher trainers were getting used to the changes over time, they were frustrated with inconsistent policy messages and a general lack of explicit training.”
Researchers recommend more concrete training and support is needed, especially in terms of supporting teachers to manage increased autonomy. They say there also needs to be a more consistent, unambiguous communication strategy.
The research suggests that the Mexican Ministry of Education needs to address concerns the changes could lead to gaps in foundational knowledge. They should consider the extent to which students may need basic knowledge in order to develop higher order skills.
Communication with parents and the wider public should also be strengthened to make it clear what NEM does and what it does not do.
Dr Bremner said: “More emphasis seems to have been placed on the “what” – the content of the reform itself – and much less on how to implement it.
“Those interviewed were very concerned about the lack of ‘foundational’ knowledge many of their students had, and there was a lot of scepticism regarding combining specific school subjects into ‘formative fields’.”
Teachers, pupils and parents were generally very supportive of content related to inclusion and diversity, but expressed doubts about certain topics, for example content relating to gender and sexuality.
Those affected by the reform were generally happy with the notion of ‘focusing on the local’, contextualisation and teacher autonomy. However, some teachers did not always know how to manage such autonomy, requesting more explicit guidance.
One local supervisor in rural Chiapas said: “There is a paradigm shift; there is a change in the approach to education. But there has been no real systematisation of teacher training.”
One local supervisor in rural Nuevo León said: “We started to be updated on a drip-feed basis. […] The information either arrived too quickly for us to transmit it, or it arrived late, or it didn’t arrive at all. You asked the corresponding educational authority, and they didn’t know either. […] I would say it is not consistent, and at many times it is not coherent.”
Estudio muestra que la reforma de la educación primaria en México ha sido recibida tanto con entusiasmo como con escepticismo.
Según investigación reciente, ha habido una respuesta diversa a la reforma de la educación primaria en México (Nueva Escuela Mexicana, NEM), la cual ha creado una incertidumbre generalizada entre los maestros, niños y padres de familia.
Los actores involucrados en la implementación de la NEM han expresado preocupación sobre la falta de capacitación para ayudarlos a prepararse para los grandes cambios, pero también demuestran entusiasmo por la mayoría de los objetivos de la NEM.
La Nueva Escuela Mexicana (NEM) en la Educación Básica representa un gran cambio en el currículo, la pedagogía y la evaluación.
Asignaturas como matemáticas y ciencias se han combinado en “campos formativos” integrados. Hay un enfoque en la educación que valora más a las comunidades locales y pone énfasis en el aprendizaje activo e interactivo a través de proyectos.
Los niños también aprenden más sobre temas relacionados con la inclusión y la diversidad.
Los maestros tienen mayor autonomía para adaptar su trabajo a los contextos locales.
La NEM ha sido recibida tanto con entusiasmo como con escepticismo. Esta investigación es una de las primeras en recopilar de manera extensa las experiencias y perspectivas de los actores involucrados en la NEM a un año de su implementación.
El estudio fue realizado por la Dra. Nozomi Sakata, de la Universidad de Hiroshima, y el Dr. Nicholas Bremner, de la Universidad de Exeter. Llevaron a cabo 79 entrevistas con estudiantes, maestros, padres, directores, formadores de maestros y supervisores en 12 escuelas primarias en Nuevo León, Hidalgo y Chiapas.
El estudio fue financiado por la Sociedad Japonesa para la Promoción de la Ciencia.
El Dr. Bremner dijo: “Encontramos una mezcla de perspectivas positivas y negativas, pero en general hay una incertidumbre generalizada sobre la reforma de la NEM. Aunque los maestros, directores y formadores de maestros se van acostumbrando a los cambios con el tiempo, están frustrados con los mensajes inconsistentes de las autoridades y la falta general de capacitación explícita.”
Los investigadores recomiendan capacitación específica y mayor apoyo, especialmente en términos de guiar a los maestros para gestionar su nueva autonomía. También dicen que se necesita una estrategia de comunicación más consistente y sin ambigüedades.
La investigación sugiere que la Secretaría de Educación Pública de México debe responder a las preocupaciones de que los cambios podrían causar lagunas en el conocimiento básico. Deberían considerar en qué medida los estudiantes necesitan conocimientos básicos para desarrollar habilidades de orden superior.
La comunicación con los padres y el público en general también debe fortalecerse para dejar claro qué hace y qué no hace la NEM.
El Dr. Bremner dice: “Parece que se ha puesto más énfasis en el ‘qué’, es decir, el contenido de la reforma en sí, y mucho menos en el ‘cómo’ implementarla.
“Los entrevistados están muy preocupados por la falta de conocimientos ‘básico’ de muchos de sus estudiantes, y hay mucho escepticismo respecto a la combinación de asignaturas escolares específicas en ‘campos formativos’.”
Se expresa apoyo al contenido relacionado con la inclusión y la diversidad (por ejemplo, de los pueblos indígenas), pero también se identificaron dudas sobre ciertos temas (por ejemplo, contenido relacionado con género y sexualidad).
Se expresa satisfacción con la noción de ‘enfocarse en lo local’, la contextualización y la autonomía docente. Sin embargo, para algunos docentes no siempre estaba claro cómo gestionar tal autonomía y solicitan una guía más explícita.
Según un supervisor en Chiapas: “Hay un cambio de paradigma; hay un cambio en el enfoque educativo. Pero no ha habido una sistematización real de la capacitación docente.”
Según otro supervisor en Nuevo León: “Nos empezaron a capacitar a cuentagotas. […] La información llegaba muy rápido para que la pasáramos o llegaba tarde, o ni llegaba. Le preguntabas a la autoridad educativa correspondiente, y ellos tampoco sabían nada. […] Yo diría que no es consistente y muchas veces ni es coherente.”